Espíritu de servicio y legado histórico del Scoutismo Polaco en Argentina
La frase "El Scout (...) ayuda voluntariamente a los demás" resume con claridad uno de los principios fundamentales del escultismo: el servicio desinteresado y la utilidad hacia los demás. Este ideal impulsa a cada Scout a comprometerse activamente en labores sociales y comunitarias, sin esperar recompensa alguna, contribuyendo así a la formación de ciudadanos responsables y al mejoramiento del mundo.
En consonancia con estos valores, el vestíbulo de nuestra sede central —ubicada en la calle Jorge Luis Borges 2076, en pleno corazón del barrio de Palermo, Ciudad Autónoma de Buenos Aires— ofrece un espacio dedicado a la memoria y difusión de la historia, la cultura y las tradiciones polacas. Allí, varias vitrinas exhiben objetos y materiales relacionados con fechas conmemorativas importantes para la comunidad.
Estas vidrieras son cuidadosamente acondicionadas con esmero y profesionalismo por la Sra. Bárbara Kamiski, Secretaria de la Asociación Cultural Argentino-Polaca (ACAP), quien se encarga de preservar y transmitir el legado cultural de nuestras raíces.
En cuanto al desarrollo del movimiento scout polaco en Argentina, sus primeras unidades se formaron en 1935 en la localidad de Berisso, bajo el liderazgo del “Druh” W. Brzezinski y la “Druhna” J. Petkunówna. Tres años más tarde, el presidente del Związek Harcerstwa Polskiego (Unión de Scoutismo Polaco en Polonia) oficializó la creación del Scoutismo Polaco en Argentina.
Sin embargo, el estallido de la Segunda Guerra Mundial marcó un duro revés. Muchos de los líderes del movimiento en Argentina partieron como voluntarios para alistarse en el Ejército Polaco, lo que limitó seriamente su desarrollo local durante ese periodo.
Finalizado el conflicto bélico, y con la llegada de una nueva ola de inmigración polaca a Argentina, el escultismo polaco renació con fuerza bajo la dirección del “Druh Harcmistrz” S. J. Poray Tucholski. Este resurgimiento llevó a la creación de nuevos centros scouts en distintas regiones del país.
El 2 de octubre de 1951 se estableció formalmente el Distrito de Argentina, y su institucionalización definitiva se concretó tres años más tarde bajo el liderazgo del profesor y “Druh” S. Pyzik, reconocido escritor, historiador y filólogo polaco.
Este recorrido histórico refleja no solo la perseverancia de una comunidad, sino también el compromiso de sus miembros por mantener vivas las tradiciones, educar en valores y formar nuevas generaciones de Scouts comprometidos con el servicio, la identidad y la memoria.
Las actividades del Scout Polaco, se llevan a cabo en cinco centros de Argentina:
Andrés Chowanczak
Vicepresidente de la Unión de los Polacos en la República Argentina